La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible en el Parque Natural Los Alcornocales ha comunicado al departamento de Informes y Sanciones los movimientos de tierra y obras llevadas a cabo en el Pinar del Rey (San Roque), denunciados por Verdemar Ecologistas en Acción.
Estas obras se han llevado a cabo dentro de los límites del Parque Natural de Los Alcornocales , sin haberlo comunicado a la gerencia del mismo,y por tanto infringen lo dispuesto en el artículo 16 de la Ley 2/1989 de 18 de julio, por la que se aprueba el Inventario de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía y se establecen medidas adicionales para su protección y de acuerdo con el Decreto 150/2017, de 19 de Septiembre, por el que se aprueba el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del ámbito Los Alcornocales, se amplía el ámbito territorial del Parque Natural Los Alcornocales y de la Zona de Especial Protección para las Aves Los Alcornocales (ES0000049), y se aprueba el Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural Los Alcornocales.
En nuestra denuncia alertábamos de que las modificaciones en el Pinar del Rey en San Roque (Cádiz) lo acabarían convirtiéndolo en una especie de jardín urbano. Este y otros impactos que está sufriendo el Pinar del Rey, están terminando con especies botánicas de interés de este espacio protegido. Esto genera un extraordinario daño al suelo, al facilitar su pérdida y degradación erosiva, provocando además un brutal e inexplicable impacto paisajístico. Los movimientos de tierra para hacer parques infantiles y campos de futbol, donde existen especies endémicas de flora como la Drosophyllum lusitanicum o la Bellis cordifolia, no cumplen con las normativas ambientales.
El Ayuntamiento de San Roque está incumpliendo los objetivos generales para este Parque Natural que establece el PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales), que deberían ser objetivos específicos para su gestión y cuidado.
La invasión de vehículos a motor de todo tipo y la pésima gestión en el Pinar del Rey erosionan y degradan la cobertura vegetal.
Alertamos de que se trata de una situación preocupante, porque, si se sigue con el mismo tratamiento, acabará arruinando el suelo y el paisaje de toda la zona, cambiando gravemente el ecosistema.