Era enérgica como un huracán. Y algecirista de los pies a la cabeza. Elvira Gómez Bosch, la señorita Elvira, era conocida en nuestra ciudad tanto por su profesión de maestra como por su amor infinito hacia el Algeciras Club de Fútbol.
Rosendo Arias, algecirista de pro, le hizo una entrevista a la señorita Elvira que publicó en el desaparecido semanario “Algeciras” (nº 12) del 16 de mayo de 1980. Arias quiso en la conversación descubrir para los lectores el cariz personal de la señorita pero, también, dejar patente su algecirismo militante. Nuestra protagonista recibió la insignia de oro del Algeciras Club de Fútbol en septiembre de 1971, siendo presidente de la entidad José Luis Fernández Calderón. En el final de la Liga 1973/ 74 fue parte activa de los Héroes de Barbastro, como se denomina en la historia rojiblanca a quienes se desplazaron a esta localidad aragonesa, en un viaje pleno de épica, para ver ascender al equipo de Regional a Tercera.
La señorita Elvira, en una portada de la revista Algeciras del año 1980.
En la mencionada entrevista, la señorita Elvira, recordada por su nerviosismo en la grada, alaba el pundonor del centrocampista organizador Rafael Quindejo, “que se deja el alma en el campo”. El portero Omits, al que los más maduros de la hinchada albirroja no olvidan, era para la señorita un auténtico ídolo del ayer algecirista.
En los momentos en los que se realizó la entrevista para “Algeciras”, el equipo rojiblanco había descendido a Segunda B tras la nefasta campaña 1979/ 80, en la que el graderío del viejo El Mirador sufrió mucho. Ha sido uno de los ascensos más dolorosos, con varios cambios de entrenador e incluso de junta directiva a lo largo de una misma temporada.
“La solución es coger jugadores de la cantera, a los que les duela el Algeciras de verdad”, proponía la maestra. La señorita Elvira falleció hace años, pero su recuerdo sigue presente en el graderío.
La señorita ejecuta magistralmente un saque de honor en el viejo El Mirador.