Hace escasamente unas horas, ha sido liberada parte de la tripulación del petrolero iraní “Grace 1”, retenido por las autoridades de Gibraltar desde el pasado 4 de julio. Entre los liberados se encuentra el propio capitán del buque.
El “Grace 1” fue retenido bajo sospecha de que estaba enviando 2,1 millones de barriles de petróleo crudo a Siria, violando las sanciones de la Unión Europea.
Dos semanas después de que el Grace 1 fuera abordado por más autoridades gibraltareñas apoyadas por la Royal Navy, los Guardias Revolucionarios de Irán se apoderaron de un buque cisterna de bandera británica. Reino Unido valora este hecho como un “ojo por ojo”, señalando que no hay paralelo entre la detención del Grace 1 y la decisión de Irán de capturar a Stena Impero en aguas internacionales.
Tras la liberación de los oficiales, y aunque en un primero momento se tenía previsto poner fin también a la retención del buque, las alegaciones presentadas por el Departamento de Justicia de los Estados Unidos han provocado que se aplace dicha decisión a esta tarde.