Nos trasladamos a la pequeña pedanía Sanroqueña de Campamento. Este edificio más que encantado, tiene encanto.
Lo más llamativo del mismo no es si cabe su bonita arquitectura, ya que sus restos aún dejan ver lo que en su día fuese una imponente fachada victoriana; sino el motivo de por qué se abandono tan apresuradamente la finca.
Don Jaime Russo O`Reilly, Cónsul de Cuba en Gibraltar, adquiere esta finca en los años cuarenta, La Finca de la Rosaleda. Divididas en tres zonas esta enorme finca contaba con los jardines de El Palmeral, con una superficie de 21.509 metros cuadrados. La Rosaleda donde se situaba el edificio central y que poseía un imponente jardín botánico con diferentes especies, entre ellas el árbol del pan (de América) y que tenía una extensión de 9.317 metros cuadrados, y un palacete cercano (ya desaparecido) de 91 metros cuadrados.
La gente de la zona nos comenta que dicha finca tuvo su época de esplendor en la posguerra española, época difícil para España, donde esta finca era lo más parecido al paraíso para los vecinos de Campamento. Mucha gente del pueblo trabajo para el servicio del Cónsul.
Lo mas misteriosos del asunto es que poco o nada se sabe de la apresurada marcha de la familia Russo de la Finca; dejando atrás muebles y enseres. La finca permaneció abandonada hasta que en el año 2002 el ayuntamiento se hace cargo de la misma creando un pequeño parque infantil en la zona del palmeral.
Si sabes más sobre el tema, o de que fue de Don Jaime Russo O`Reilly y su familia hazlo saber mediante mensaje a nuestro correo o por medio de nuestras redes sociales.
En Misteriosur nos pondremos en contacto con algún historiador de la zona para intentar averiguar más sobre el caso.
MisterioSur.
