La prisión de Botafuegos se ha convertido en un centro de extrema peligrosidad donde las organizaciones de narcos campan a sus anchas, pudiendo conseguir cualquier objeto mediante la peligrosa combinación de drones y teléfonos móviles de última generación que guían a los primeros hasta el lugar que deseen
ACAIP-UGT ha denunciado la inoperatividad de los inhibidores de frecuencia de móviles, ya obsoletos y advierten de la responsabilidad de la dirección de Prisiones y del propio Ministerio ante la dejación evidente de sus funciones de control y seguridad de los centros penitenciarios.
Amenazas, coacciones, agresiones o incluso la quema de coches se ha convertido en una suerte cada vez más frecuente que podría evitarse con mayores sanciones o traslados de presos pero no se atajan con la actual política de «buenismo» y dejación del Ministerio, aseveran los funcionarios.
José Ramón López, presidente de ACAIP-UGT sindicato mayoritario en prisiones, ha manifestado esta mañana en rueda prensa que el ministerio del interior debe dar explicaciones de por qué no funcionan los inhibidores de frecuencia de móviles en las prisiones españolas.
Durante la rueda de prensa celebrada en Algeciras, se ha tratado la difícil situación que se vive en la prisión de Botafuegos, en la que, durante los últimos meses, se han producido una serie de hechos muy preocupantes comocoacciones y amenazas a los trabajadores,además de un aumento en la conflictividad con los internos. Los datos de 2022, a 30 de septiembre, reflejan 11 agresiones atrabajadores del centro penitenciario, lo que multiplica por 3 las producidas otros años a pesar de haberse reducido la población reclusa. Además, la gravedad de las mismas ha aumentado, generando preocupación entre los trabajadores.
También ha habido un aumento de incautacion de móviles y de detección de drones. Esto último es de especial gravedad por los problemas de seguridad que puedegenerar, por la facilidad con la que podrían introducirse objetos muy peligrosos como armas o explosivos.
José Ramón López ha destacado durante su intervención la necesidad de tomar medidas que eviten las facilidades del uso de móviles o el vuelo de drones, instalando inhibidores adecuados, un problema que afecta a todas las prisiones pero que en Algeciras se ha visto incrementado por las organizaciones vinculadas al tráfico de drogas. Además, ha pedido que se realice una política de dispersión de los internos relacionados con el narcotrafico, que presumiblemente están detrás de todos estos incidentes.
Ha manifestado, a su vez, que no es normal que a pesar de la quema de coches de compañeros, de los plantes de internos, de las agresiones a funcionarios, o de la continua aprehension de móviles, no se produzcan traslados y los presuntos implicados en estas acciones permanezcan en el centro.
Desde ACAIP-UGT se ha instado a que se tomen medidas urgentes antes de que tengamos que lamentar una desgracia irreparable.